UNA DIVERSIÓN CON A PALABRA
UNA
DIVERSIÓN CON LA PALABRA
“...Del cielo cayó una rosa,
Mi
Madre la recogió,
Se
la puso en la cabeza
Y que linda que quedó. ”
Por mucha y bellas razones el Hombre vive dando gracias a la vida, a Dios o a los Dioses y hasta a los Santos, según sea su costumbre, su nivel educativo, su profundidad, su tradición, su filosofía o su religión..
Yo me uno a muchos a quienes la sensibilidad les llama y no pueden ocultar su goce y admiración por la palabra.
Y es que con la palabra disfrutamos tanto,
porque nos sirve para todo. Con la palabra nos acariciaron a todos cuando
niños:
“ Sana que sana culito de rana
Si no sana hoy sanará
mañana :”
Con la
palabra todos jugamos:
... “ Tres tristes tigres, comieron en tres tristes
platos trigo”
“ Agua pasó por aquí y cate que no la vi.”
“ Compadre cómprame un coco.
No Compadre, no compro coco,
Porque como poco coco como,
Poco coco compro.”
Con la
palabra sé fábula:
“...Si el ignorante intenta mostrarse
sabio
Pronto asoma las orejas de borrico...”
“..Agua que no has de beber
Amigo déjala correr.”
Y la palabra se esconde a veces no se
encuentra:
“...Ah...Cómo se dice.? Tenía
la
Palabra en la punta de la lengua...”
Esta frase la oímos y decimos con suma
frecuencia.
Amigos
disfrutemos la palabra con Neruda:
“... Todo está en la palabra...una idea entera
se cambia porque una palabra se trasladó de sitio, o porque otra se sentó como
una reinita adentro de una frase que no la esperaba y que la obedeció.”
“...Las palabras son tan hermosas que las
quiero poner todas en mi poema...”
“...En la palabra puede ser dicho lo más puro
y lo más culto al igual que lo confuso y lo vulgar.”
Es tan cierto lo observado por Neruda que gozamos de la palabra cuando vemos el cambio total de sentido con el solo traslado de un a palabra en la frase: “ – El vivo no vino. ”; por , “ el no vivo vino.”
Gocemos la palabra con Machado:
“ Si un grano del pensar arder pudiera
No en el amante,
en el amor, sería
La más honda verdad lo que se viera.”
“...El hombre es por natura la bestia paradójica,
un animal absurdo que necesita lógica.
Creó de la nada un mundo y su
obra terminada,
“Ya estoy en el secreto, dijo todo es nada.”
“..Poeta ayer, hoy triste y pobre
Filósofo trasnochado
Tengo en moneda de cobre
. El oro de ayer cambiado.”
Pero qué es la palabra en el oficio de hablar.?
Primero pensemos en que hablar es asignar y consignar sonidos a cosas especiales. Al hablar, por hablar y para hablar, asignamos y consignamos sonidos a cosas. Bueno aquí recordar que en el inicio griego el termino “logos” hablaba al mismo tiempo de ser y decir. O sea que la palabra misma daba una relación de cosa que es. Es decir que al hablar seguimos con la lengua el perfil definitorio de una cosa y lo que en virtud de tan preciso recorrido se emite y da al aire en sonido es la “palabra.”
Y decir en voz alta lo que las cosas son cada una en sí mismas eso es “hablar”
Todo esto a quién pertenece sino al Hombre ? Es el Hombre el heredero y aprendiz de todas las cosas y para testificar esta pertenencia y salir a la realidad se le ha dado al hombre la palabra.
Y como el hombre se intercomunica por su propia sociabilidad la palabra viene a él como diálogo porque así podemos los unos oír a los otros. Es un conjunto de vocablos y de reglas para unirnos, donde la palabra hace de medio para lograrlo.
En la experiencia con el habla surgen dos vertientes: una que es pensante y otra que es poetizada. La primera es la obra que utiliza la palabra para el lenguaje del pensamiento en la ciencia suprema de la razón y del entendimiento (La Filosofía) y la segunda la que utiliza la palabra para el lenguaje del arte, la poesía ese ejercicio de imaginación y fantasía profundizado en la más honda sensibilidad espiritual.
Al tocar este tema no podríamos hacerlo sin tener presente a Holderlin quién dice: “ Poesía es, pues, fundación del ser por la palabra de la boca .”
De acuerdo con él, hacer poesía es:
“ hacer entrega de nombres a los Dioses.”
Son los Poetas los que fundan las palabras en las cosas y nos las dan a los mortales para que las usemos, las manoseemos y las olvidemos. Observemos este mensaje que él nos regala:
“Lleno está de méritos el Hombre
más no por ellos; por la Poesía ha hecho de
esta tierra su morada.”
Holderlin no ve la Poesía como un adorno a la realidad, ni un excesivo entusiasmo o entretenimiento, para él “...la Poesía es el fundamento y soporte de la historia; no una simple manifestación cultural, menos aún expresión del alma de una cultura.”
Que bello, este
pequeño ejercicio lo vamos logrando con la palabra. Tendrá razón Holderlin
cuando pregunta:
Será la Palabra el más peligroso de todos los bienes?
No podría pasar desapercibido el virtuoso aporte que en este tema nos regaló León de Greiff, (ese gran maestro de la palabra inventada ) cuando en cualquiera de sus escritos poéticos nos divierte:
“...Cambio mi
vida por lámparas viejas
o por
los dados con que se jugó su túnicas inconsútil:
_por lo
más anodino, por lo más obvio, por lo más fútil
por los
colgajos que se guinda en las orejas
la
simiesca mulata
la
terracota rubia
la
pálida morena, la amarilla oriental, o la hiperbórea rubia
... La
cambio por un romance, la cambio por un soneto
por
once gatos de Angora,
por
una copla, por una saeta,
por un cantar;
por
una baraja incompleta;
por
una faca, por una pipa, por una sambuca...
o por una muñeca que llora
como cualquier poeta. ”
Y que sería del
amor sin la palabra...?
Montañas de escritos ha realizado el Hombre con el fuego del amor, desde el más elemental hasta el más intelectual, sí, todos, todos en algún instante hemos utilizado la palabra en la sensibilización inspiradora que nos produce el amor. Sí ese amor definido como aquella maravillosa y casi mágica espiritualización de la sensualidad. Sin la palabra no disfrutaríamos de esta bella creación de la pluma de León de Greiff:
“ “
Esta rosa fue testigo ”
de
ése que si amor no fue,
ningún otro amor sería.
Esta
rosa fue testigo
De
cuando te diste mía
El
día, ya no lo sé
---sí lo sé, más no lo
digo---
Esta rosa fue testigo.”
Amigos lectores, sin la palabra sencillamente no existiríamos y mucho menos nos divertiríamos.
Qué decir de lo que le deben a la palabra los abogados, los filósofos, los periodistas y otros muchos que su razón profesional de ser se funda en la palabra ?.
Entonces podríamos deducir que también la palabra nos da de comer.
Por ahora amigo, respetuosamente les cedo “LA PALABRA”
Comentarios
Publicar un comentario